José Luis Cuevas, o la rebeldía del arte


El Arte surge como una necesidad de expresión emocional e intelectual del más puro, potente y creativo estado espiritual del ser humano; y suele ser en la juventud cuando estas características se expanden de manera radial en el entorno de su sociedad.

Genio y Figura desde su aparición en la escena cultural de México, José Luis Cuevas encarna el ideal del Artista que se sabe revolucionario por su personalidad misma, y que constituye una de las piezas clave del panorama de la plástica nacional –que no nacionalista-, gracias a su discurso estético rupturista.

Esta exposición que hoy tenemos el privilegio de presentar en San Luis Potosí, es un ejemplo de la voluntad transformadora que insufla el espíritu de ese Cuevas rebelde, perpetuamente joven por definición, que hoy es un orgullo para los mexicanos, dada la importante y abundante creación artística que le caracterizó durante su vida.

De ahí que la aproximación a su Arte, sea también una aproximación al histórico periodo de separación entre las capas tectónicas del muralismo y el arte contemporáneo mexicano, lo que sin duda abrió el horizonte para los creadores de nuevas generaciones que encontraban, en la confrontación entre Cuevas y los grandes muralistas, un motivo de inspiración.

Cuevas es también el provocador del debate, el cuestionador de las formas, el polemista incansable de las ideas que sigue ejerciendo una constante presencia entre los estudiosos del Arte mexicano, pues la huella de su creación es, al mismo tiempo que monumental, poseedora de esa extraña belleza que surge entre lo grotesco y lo monstruoso.

Por ello resulta de enorme importancia que el Museo Federico Silva sea el escenario de una exposición cuyo interés, estoy seguro, seguirá suscitando debates íntimos entre sus espectadores, dada la compleja y extraordinaria facultad de mostrar, a través de su visión particular, la esencia más misteriosa de nuestro interior humano.

Juan Manuel Carreras López

Gobernador Constitucional de San Luis Potosí